Conoce la Universidad
El Ministerio Educativo de la UCLAME
El Ministerio de la Universidad
La Universidad es un Ministerio Educación Teológica y Ministerial con una visión para la congregación local, aunque el ministerio es internacional en su alcance, la Universidad se compromete a ayudar al ministerio de la congregación local, desde el nivel más básico los estudiantes son preparados, dándoles como reto, respaldar mejor a sus congregaciones y ministrar con mayor eficacia el Evangelio de Jesucristo.
Un objetivo fundamental en el establecimiento de la Universidad ha sido el compromiso de servir a la congregación a través de sus egresados, con toda su diversidad étnica y cultural. Creemos que la sociedad se enriquece del pluralismo de sus poblaciones y culturas, por lo que animamos el respeto dentro de la variedad cultural de la familia del Señor.
Las Universidad y su Relación con las congregaciones
La universidad pretende colaborar en la capacitación de los llamados por Dios para el ministerio en la congregación, creemos firmemente que él reunirnos un grupo de hermanos para constituir esta institución para el servicio a la congregación evangélica, fue dada por Dios. La de poder llevar la educación bíblica y sus diferentes áreas o campos de trabajo a la congregación asido nuestro motor de emprender esta obra sin fines de lucro, con el objeto de servir. De esta manera buscamos proveer recursos a la congregación local para que desempeñen a un mejor la obra de Dios en su comunidad.
1. La Perspectiva Histórica
Aunque hayan sido instruidos de la misma fuente bíblica, los cristianos, a través de los siglos, han llegado a entendimientos muy diversos sobre la misión y la naturaleza de la congregación. A la base de estos excite la idea de que una congregación local debe ser constituida solamente de creyentes entregados y en práctica, que:
a) Han hecho una declaración pública de su compromiso a la nueva vida en Cristo, demostrándola mediante el bautismo.
b) Por su voluntad propia hacen pacto con Dios y con los otros, para promover la obra reconciliadora de Dios.
La libertar religiosa ha traído consecuencias significativas para las congregaciones. Connota, entre otras cosas:
a) Que cada persona tiene el derecho y la capacidad de acceso personal a Dios, sin ningún intermedio humano o institucional.
b) Que cada individuo tiene el derecho, la capacidad y la responsabilidad de interpretar las Escrituras.
c) Que cada creyente tiene la responsabilidad sacerdotal por el bienestar de la comunidad de fe entera y la sociedad en general.
d) Que las iglesias locales son libres para determinar sus propias políticas y doctrinas, a la vez que mantienen la interrelación al cuerpo mayor y universal de Cristo.
2. Una Perspectiva Bíblica
Dios, el Espíritu Santo, se ha dado a conocer al hombre desde el principio. Desde el llamamiento de Abraham, una forma especial de eclesial ha surgido: Dios siempre el líder y el dador de la ley, el sustentador y el proveedor; la humildad siempre sus súbditos, y a causa de la naturaleza caída, sus “insubordinados”. El testimonio del Antiguo Testamentos, que a pesar de la rebelión continua de los hombres y mujeres, Dios firmemente ha preparado un modo de relacionarse en una forma más directa con ellos.


En un sentido singular, Israel entonces es el pueblo de Dios. A esta nación Dios se dio a conocer como uno, como creador, santo, justo y amoroso. Fue mediante esta, que le dio un nuevo sentido a las viejas palabras en la misma búsqueda de revelación y es ahí, donde Dios habría de confiar para la manifestación de su morada perfecta entre nosotros: Jesús el Cristo.
En la época de Jesús, él y los que le siguieron constituyeron la iglesia. Después de su partida, el grupo creciente de discípulos continúo como el pueblo escogido de Dios, como “el nuevo Israel”. Dios, el Espíritu Santo, los ha llamado, sostenido, inspirado y guardado hasta este mismo día.
Adorar a Dios es el modo más natural para que la iglesia haga conciencia de sí misma. Porque Dios es quien nos hizo a todos, la misión de la iglesia debe ser la de extenderse hacia las multitudes hasta alcanzarlas, para vivir y compartir su mensaje de amor y perdón.
3. Una Perspectiva Educacional
La congregación tiene que enseñar, si ha de sobrevivir la próxima generación. Las preguntas esta en su efectividad de comunicar el significado de una nueva vida en Cristo, a personas y estructuras sociales. La educación cristiana puede ayudarnos a hacer preguntas y a evaluar las diversas opciones al considerar maneras más apropiadas de extender nuestra comunidad de fe.
La singularidad de la educación cristiana es el enfoque sobre las necesidades de desarrollo personal, ya que provee el contexto en el que Jesucristo, como las buenas nuevas de Dios, puede intervenir en estas necesidades de las personas, de tal manera que ayude a los creyentes a descubrir modos de relacionarse a sí mismos (aceptación) y a aprox. (amor incondicionalmente).
Aunque la disciplina no es cosa nueva, la función de una comunidad de fe que enseña y aprende es tan antigua como el pacto de Dios con Israel. La palabra exhorta a los padres para que sé responsabilicen por la instrucción moral de los niños, y así extender la bendición de la comunidad de pacto a un compañerismo de creyentes que se va ampliando cada vez más.
Jesús se identifico como maestro en Israel, entre amigos y enemigos. El uso que Jesús le dio a la sinagoga como ambiente para la enseñanza y formación de un grupo de discípulos para instrucción y misión, estableció el patrón que deberán imitar. Jesús declaro la misión de la iglesia cuando dio a sus discípulos la tarea de discipular a todas las naciones. La UCLAM se compromete ayuda a la iglesia local a llevar a cabo esta tarea.